En los mantenimientos de jardines, una de las labores es la poda o recorte de los setos.
Para evitar que los setos tengan brotes que se lignifiquen y los cortes sean de mayores diámetros y por lo tanto cicatricen peor, además de tener un aspecto descuidado, deberíamos al menos, realizar dos podas de recorte de seto al año.
Dependiendo de la zona tendremos:
En este artículo vamos a tratar...
1.Climas continentales de inviernos largos y fríos y veranos cálidos
Primer recorte:
-
- En pleno crecimiento de primavera (abril-mayo), paralizando el crecimiento y manteniendo una apariencia cuidada y regular.
Segundo recorte:
- Al final del verano (septiembre) con la misión de controlar los brotes otoñales y mantener igualado el seto.
Con estos mantenimientos en el seto de nuestro jardín, lo tendremos podado durante la mayor parte del periodo de crecimiento de la planta y además disminuiremos el crecimiento debido al efecto “parada” de las dos intervenciones.
En el caso de la de primavera, puede ser de unos 30 días y en la de otoño aproximadamente de 15 días de parada de crecimiento.
2. Climas de inviernos suaves
Por ejemplo en el litoral del mediterráneo, la costa cantábrica o la costa andaluza, el crecimiento de los setos es bastante más largo (febrero-noviembre), sin llegar a tener una parada vegetativa estival clara, e incluso sin parada invernal. En estas situaciones se precisará de tres a cinco intervenciones a lo largo del año en este orden:
Primer recorte:
- De finales de febrero a marzo, en plena brotación primaveral. Esto provocará un intenso efecto parada del crecimiento.
Segundo recorte:
- Durante el mes de mayo, cuando los nuevos brotes tengan unos 20cm de longitud, es u. buen momento para parar el crecimiento de nuevo dejar regular el seto.
Tercer recorte:
- En pleno verano en el mes de julio o incluso hasta agosto, consiguiendo mantener la forma regular en este periodo.
Cuarto recorte:
- A finales de octubre y según los casos podría ser necesario incluso un quinto recorte.
Los costes de un mantenimiento de poda de seto con más de dos intervenciones son tan elevados, que hace que solo en jardines históricos o muy representativos se suela realizar.
En resumen
La consecuencia de realizar unos malos mantenimientos de poda en nuestros setos es el envejecimiento y en ocasiones la degeneración casi irrecuperable en no muchos años. En algunos casos, es frecuente ver jardines que al no tener la mano de obra necesaria, realizan un recorte en invierno, que es cuando menos trabajo tienen.
Esto da efecto de seto regular pero debido al frío no cicatrizan bien los cortes y puede dañar la brotación de primavera.
Las podas de recortes de setos se deben realizar en verde, esto significa en crecimiento vegetativo, actuando sobre los brotes nuevos.
El objetivo es paralizar el crecimiento y mantener regular la forma del seto.